Cuando un paciente pierde una gran cantidad de peso tras largos periodos de obesidad se va a encontrar con que la piel se le ha descolgadao de forma excesiva. La piel puede retraer hasta cierto límite, pero hay zonas donde no podrá eliminarse por completo aunque haya perdido mucho peso y tenga el cuerpo tonificado.
Hombres y mujeres presentan por igual los mismos problemas en estas situaciones.
En la mujer nos vamos a encontrar con exceso de piel en abdomen y espalda, cara interna de muslos, brazos, pecho y costados. En el hombre las zonas son iguales, aunque la reconstrucción difiere en el caso de la mama, donde debemos aplanar al máximo evitando la sensación de mama femenina caída.
A las cirugías clásicas de Abdominoplastia, Cruroplastia, Braquioplastia y Mastopexia debemos añadir otras técnicas asociadas para corregir esta situación. No son exactamente iguales a cuando un paciente quiere hacerse estas cirugías sin que haya perdido grandes proporciones de peso corporal. Las cicatrices cambian de sitio y longitud y debemos tener en cuenta que tendrán que asociarse varias cirugías en un paciente.
Será muy importante planificar la cronología de las cirugías, el orden y las variaciones de las técnicas clásicas. Podríamos decir que es una subespecialidad dentro de la Cirugía Plástica y Estética Corporal.